
Diálogo de saberes, una mirada desde el pluralismo metodológico propio y decolonial
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Volumen 34, Año 17, No. 2, Julio-Diciembre, 2024. CIENCIA E INTERCULTURALIDAD
La Crianza de Sabidurías y Conocimientos (CCRISAC) desde el rastreo etimológico
Para los pueblos indígenas, la descolonización en los procesos de investigación
implica un proceso de liberación de las estructuras de pensamiento que subestiman
los conocimientos y sabidurías ancestrales, en este sentido, Pannika (1994) citado por
Anderson et al. (2018) sostiene que “el paradigma indígena de investigación se construye
en diálogo con la ciencia occidental, pero se origina en la ciencia ancestral” (…) “ya
que requiere interlocutar con los términos occidentales para constituir metodologías
originalmente indígenas y decoloniales” (Kovach, 2010, Anderson et al., 2018, p. 189).
En el contexto del pluralismo metodológico del CRISSAC, existen diferentes formas
de crianza de sabidurías y conocimientos, teniendo en consideración la vivencialidad,
como se explica a continuación:
El rastreo etimológico comprende la búsqueda de signicados y signicaciones
en las raíces, descomposiciones y composiciones de los términos de las lenguas
originarias, principalmente de los topónimos, tónimios y antropónimos. A partir
de esta información y haciendo comparaciones con los signicados existentes en
documentos históricos de las distintas familias lingüísticas, se puede estimar el
tiempo de vigencia, fusión y extinción de determinadas lenguas y consecuentemente
de cultura (Red de Universidades Indígenas Interculturales y Comunitarias de Abya
Yala. (RUIICAY. 2018, p. 35)
Esta técnica propia del CCRISAC, se enfoca en el análisis profundo de las lenguas a
través de su evolución y transformación a lo largo del tiempo, utilizando herramientas
lingüísticas sosticadas que permiten desentrañar las raíces de las palabras, así como
los cambios fonéticos y semánticos que estas han experimentado.
Este enfoque se basa en la idea de que las lenguas son portadoras de una historia
viva, reejando no solo la evolución de los términos, sino también los procesos
socioculturales, históricos y geográcos que han inuido en las comunidades que las
hablan. En el rastreo etimológico, se investiga el origen de las palabras, su derivación y
cómo estas se han transformado a lo largo de las generaciones, revelando la conexión
entre diferentes lenguas y sus respectivas culturas.
Este análisis se complementa con el estudio glotocronológico, que se enfoca en la
cronología de las lenguas y su relación con el paso del tiempo, estableciendo cómo los
grupos lingüísticos han evolucionado y se han diversicado a lo largo de los siglos, lo
que permite, por ejemplo, rastrear las rutas de migración de los pueblos y su contacto
con otras culturas. Este enfoque tiene un componente profundamente cultural, ya que
no solo se interesa por la evolución de las palabras en términos lingüísticos, sino por
la forma en que estas reejan la cosmovisión y el saber ancestral de las comunidades.